Mejorar tu productividad a otro nivel
En un mundo en el disponemos de la inmediatez a golpe de pantalla táctil e internet, cada vez son más los profesionales que sienten la presión de tener todo bien atado, ser eficientes y dar una respuesta correcta en el menor tiempo posible. La falta de planificación o, mejor dicho, una planificación poco realista, nos puede llevar hacia la desmotivación y el estrés.
Esto se traduce en mayor felicidad, mayor implicación con la empresa y la familia, mejora el bienestar y, sobre todo, nos hace más capaces profesionalmente hablando.
Una de las técnicas utilizadas para gestionar el día a día es el método Pomodoro, que permite trocear el trabajo en partes más pequeñas para mejorar la productividad. Empezar por las tareas más pequeñas no siempre es la mejor opción, porque iremos postergando las más arduas y, tarde o temprano, generarán ansiedad y estrés.
La técnica se basa en establecer fragmentos de 25 minutos de trabajo ininterrumpido con su hito u objetivo. Esos minutos concentrados en una tarea, sin atender llamadas y correos electrónicos mejoran enormemente la productividad. Después, tenemos cinco minutos para atender las demandas que hemos tenido. Además, antes de ponerte a ello, dedícate algunos minutos a planificar tu día.
¿Fácil? Ponlo en práctica y cuéntanos qué tal.
Mejorar la productividad y el coaching personal
Una de las ventajas del coaching personal es que ayuda a la persona que lo recibe a desarrollar capacidades de auto-organización. Cualquier persona, tanto a nivel personal como profesional, debe ser capaz de priorizar las tareas, gozar de la desconexión y organizar su día a día en función de la importancia y/o urgencia que tiene cada tarea. Esto se traduce en mayor felicidad, mayor implicación con la empresa y la familia, mejora el bienestar y, sobre todo, nos hace más capaces profesionalmente hablando.