Relación feliz

80%

Relación con alguna dificultad

60%

Relación con alguna dificultad

30%

Relación con alguna dificultad

20%

Sexualidad

El ritmo de vida frenético que impera actualmente, las prisas, presiones, preocupaciones, desacuerdos de pareja, hábitos inadecuados… terminan por pasar factura en el ámbito sexual.

El cerebro es el órgano sexual más potente, por lo que, cuando estamos saturados por diferentes motivos, es frecuente acusar algún tipo de disfunción sexual. Resulta más difícil admitirlo que buscar la propia solución.

La disfunción sexual debemos normalizarla, aceptarla y buscar la solución.

Para ello existe la terapia sexual y los psicólogos/as sexólogos/as, para analizar la base del problema y acordar pautas a seguir, y así recuperar la plenitud en la sexualidad.

Las disfunciones suelen resultar un problema de pareja, que si no se maneja, puede interferir y deteriorar la relación. Todos debemos hacer un esfuerzo por desmitificar la problemática sexual y abordarla desde la naturalidad que subyace a la misma.

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