Psicología infanto-juvenil

La infancia y la adolescencia son etapas de la vida donde pueden aparecer diversos problemas de índole psicológica. Muchas de las dificultades no suelen solventarse de forma espontánea y requieren una atención especializada.

¿Qué ofrecemos? Las demandas más frecuentes que recibimos en DICTEA son:

  • Evaluación y rehabilitación neuropsicológica: trastorno por déficit deatención con/sin hiperactividad (TDAH), trastornos del espectro autista (TEA), problemas de memoria, discapacidad intelectual, altas capacidades, trastornos de lecto-escritura, dificultades en la expresión oral y dificultad en el aprendizaje de las matemáticas entre otros.
  • Problemas de conducta: rabietas, conducta antisocial, hiperactividad, ausencia de límites.
  • Dificultades en las Relaciones Interpersonales (timidez, habilidades sociales).
  • Trastornos de alimentación: anorexia, bulimia, trastornos por atracón.
  • Control de esfínteres.
  • Miedos, fobias, ansiedad: miedos evolutivos y fobias en general.
  • Depresión.
  • Problemas escolares: mala o nula integración en el aula, hábitos de estudio disfuncionales, fracaso escolar, acoso escolar (bullying).
  • Abuso y maltrato infantil: físico, psicológico o sexual.
  • Terapia familiar.

La psicoterapia es la gran y magnífica vía dentro del conjunto de las modalidades de tratamiento en psicopatología infantil y juvenil, ya que utiliza medios psíquicos para resolver problemas.

Todos los programas de intervención de psicología infantil se realizan en base a un programa individual, dependiendo de las características y necesidades del/la niño/a. Esta individualización, nos lleva a trabajar en tres niveles: con el/la niño/a, con su familia y con el entorno.

La máxima de nuestro trabajo es facilitar y buscar un desarrollo integral y armónico en el/la niño/a.